domingo, 30 de marzo de 2008

TURNING POINT FALL OF LIBERTY

Un videojuego pone a los nazis como ganadores de la guerra



Un videojuego puede dar vuelta la historia. Al menos así lo entienden los creadores de "Turning Point: Fall of Liberty", el último entretenimiento de Spark Unlimited, donde los nazis ganan la Segunda Guerra Mundial y donde los que pelean no son soldados sino civiles, comunes y corrientes.
Las imágenes pueden impresionar: banderas nazis colgando de la Casa Blanca, edificios repletos de insignias esvásticas y libros ardiendo en las calles de la ciudad.
"Turning point" pone a los jugadores en una situación en la que deben enfrentarse al ataque de tropas nazis en suelo americano. Ubicado en la Nueva York de 1953, el juego muestra a la Wehrmacht atacando Estados Unidos. Para ello, es necesario que Winston Churchill, el presidente británico muera atropellado en 1931 por un taxi en la 5ª Avenida y que no consiga unir a los Aliados para luchar contra los alemanes. Según publicó el diario El Mundo, Craig Allen y David Brickley, miembros del equipo, explican que no es el típico videojuego pues se lucha al más puro estilo "guerra de guerrillas".El videojuego fue creado en colaboración con Codemasters que se pondrá a la venta en noviembre para PS3, XBox 360 y PC.

LOS FALSIFICADORES

Título original: Die Fälscher (The Counterfeiters).
Director: Stefan Ruzowitzky.
País: AUSTRIA, ALEMANIA.
Año: 2007.
Reparto: Karl Markovics, August Diehl, Devid Striesow, Martin Brambach, August Zirner, Veit Stübner, Sebastian Urzendowsky, Andreas Schmidt.
Duración: 98 min.
Guión: Stefan Ruzowitzky (Historia: Adolf Burger).
Música: Marius Ruhland.
Fotografía: Benedict Neuenfels.
Género: Drama, Thriller.
Productora/Distribuidora: Coproducción Austria-Alemania.

Basado en en el libro "The Devil's Workshop”. La verdadera historia de Salomon Sorowitsch, falsificador extraordinario y bohemio. Tras ser enviado a un campo de concentración alemán en 1944, acepta ayudar a los Nazis en una organizada operación de falsificación diseñada para ayudar a financiar el esfuerzo bélico. Se trató de la mayor estafa de la historia. Se imprimieron más de 130 millones de libras esterlinas, en unas condiciones que no podían ser más trágicas o espectaculares. Durante los últimos años de la guerra, como el Reich alemán veía que el final estaba cerca, las autoridades decidieron producir sus propios billetes en las divisas de sus principales enemigos de guerra. Su objetivo era utilizar el dinero falso para inundar la economía enemiga y rellenar las vacías arcas de la guerra. En el campo de concentración de Sachsenhausen, se aislaron dos barracones del resto del campo y del mundo exterior para transformarlos en un taller de falsificación perfectamente equipado. Había nacido la "Operación Bernhard". Se trasladó a prisioneros desde otros campos hasta Sachsenhausen para poner en práctica el plan: tipógrafos profesionales, meticulosos banqueros y sencillos artesanos, que pasarían a formar parte de un comando de falsificadores de alto secreto. Podían elegir: si colaboraban con el enemigo, tendrían una posibilidad de sobrevivir, ya que sería prisioneros de primera clase en una "jaula de oro " con suficiente comida y una cama donde dormir. Si saboteaban la operación, les esperaba una muerte segura. Para LOS FALSIFICADORES, no era sólo una cuestión de salvar sus propias vidas, sino también de salvar sus conciencias...

PREMIOS y NOMINACIONES
2007: Oscar a la mejor película de habla no inglesa. 2007: Seminci: Espiga de Plata, mejor actor (Karl Markovics) / Drama. Nazismo. Holocausto / SINOPSIS: Berlín, 1936. Sorowitsch (Karl Markovics) es el rey de los falsificadores de moneda. Pronto es arrestado por los nazis y llevado a un campo de concentración donde es obligado a trabajar para ellos junto a otro grupo de falsificadores. Esto les supone un dilema moral ya que cooperar con sus verdugos prolongará la guerra y podría significar la victoria para los alemanes. (FILMAFFINITY).